¿Ya has empezado con el 2023?
¿Has oído alguna vez lo de parálisis por el análisis? No tiene ningún sentido, ¿verdad? Pero se dice porque pasa, y mucho, y sobre todo en estas fechas, que parece que el 01/01 fuera a pasar algo que no pasaba el 31/12.
Y yo, que soy muy fan de analizar para planificar y lo recomiendo muy mucho, reconozco que estos días estoy un poco saturada de ver como todavía hay quien lo para todo porque tiene que planificar. Y me pregunto; si paras, ¿qué vas a planificar? Para planificar (proyectar hacia delante) debemos analizar (revisamos acciones anteriores y nuestro entorno), y si solo lo haces en enero, que analizas, ¿una acción que hiciste el año pasado en unas circunstancias que quizás no vuelvan a pasar? Lo que hiciste hace seis meses, tenía sus razones en un contexto concreto, ¿estás seguro de que estas circunstancias se van a reproducir? ¿O vas a planificar todo el año en función de como estás en enero?
Al final lo único que conseguimos es justificar unas acciones sin extraer aprendizaje ninguno y lo peor sin sacar un sistema del que aprender, mejorar y que podamos proyectar.
Entonces, pregúntate antes, ¿para qué lo estás haciendo, porque ahora, porque solamente una vez al año? Es decir, para mí, no tiene ningún sentido que nos pongamos a planificar y a analizar como locos sin una estrategia ni un para qué.
Y me dirás; «pues, para no ir como pollo sin cabeza o para tenerlo todo más controlado», pues claro, ¿pero para todo el año, no? ¿O solo quieres controlar e ir relajado en enero? Entonces lo que necesitas es un sistema, un método que te permita en todo momento y sin parar tu negocio, percibir oportunidades o amenazas en tu entorno, así como detectar debilidades y controlar tus fortalezas (siempre en función del cliente) y traducirlo en acciones que estén alineadas entre sí y con tus objetivos.
Es como ir al gimnasio solo en enero y pretender estar en forma el resto del año, está claro que analizar y planificar es bueno y una necesidad que todo negocio tiene, pero debemos convertirlo en un hábito integrado en nuestro negocio.
Son mecanismos complejos que se van interiorizando e incorporando al negocio en progresión, a base de escuchar, preguntar y observar, teniendo integrado en el día a día un proceso de análisis y un sistema para pasar a la acción rápidamente y analizar sus resultados cuanto antes para poder mejorar y evolucionar, justo cuando pasa y no meses después. Y entonces, solo entonces, y si quieres, puedes hacer una revisión más amplia, un resumen, un cierre periódico que recoja el resultado de dicho aprendizaje, y lo puedes hacer en enero, sí, pero también en julio y en setiembre y cuando tu negocio lo necesite. Y así es como se va creando un sistema sencillo, eficaz y perdurable en el tiempo.
¿Y qué es un sistema sencillo, eficaz y perdurable en el tiempo? Pues el que se adapta a tu negocio y a ti. Siento si te he decepcionado no dándote la fórmula mágica, si es lo que esperabas sigue buscando porque yo no la tengo. Lo que sí te puedo asegurar, es que puedes integrar en tu estructura tu propio sistema eficaz que implique;
1- Un análisis proactivo (tanto interno como externo),
- No reaccionamos a los eventos, analizamos para adelantarnos a ellos, intuimos, contrastamos y evaluamos una situación antes de que sea tarde. Así que reaccionamos a las señales y nos mantenemos en alerta y conectados con nuestra intuición empresarial.
2- Una revisión positiva (buscando la oportunidad) y
- Si detectamos y contrastamos cualquier cambio, lo valoramos desde la consciencia y con una perspectiva positiva. Me explico, a menudo veo negocios que no explotan oportunidades y/o fortalezas por no ser conscientes de su situación (fase 1). Y en situaciones negativas o posibles amenazas me encuentro con negocios resignados a la situación, cuando un enfoque positivo es posible.
3- Soluciones con mejoras creativas (de mano de tu comunidad).
- Por experiencia, si venimos del punto 1 y 2, estamos muy cerca de soluciones creativas, si además contamos con nuestra comunidad de clientes para probar y explorar nuevas alternativas, los resultados son innovación, diferenciación y afinidad.
Así que, sobre todo no pares para analizar, si no al final no queda nada que analizar. Y, actúa solo con estrategia, si no solo ordenas acciones en el tiempo, pero que no tienen ninguna coherencia entre sí.
¿Te apuntas a la mayoria silenciosa? 🙂